Pionera en casi todo en la historia del cómic español desde que en 1981 comenzara a colaborar en la mítica revista underground El Víbora y poco después abriera caminos en el cómic erótico creado por mujeres, Laura Pérez Vernetti ha destacado también en otros trabajos experimentales como el que une las semióticas de la viñeta y de la literatura.

Esta experimentación la han conducido hasta la poesía gráfica, en la que destaca con abundantes títulos publicados como, entre otros, Las habitaciones desmanteladas (1999), Pessoa & Cia (2012), Poèmic (2015), Yo, Rilke (2016), Vive la vida (2022) o el reciente y maravilloso Insólitos, publicado por la también pionera editorial malagueña de poesía Letraversal.

Tu relación con la literatura es extensa en el tiempo. ¿Cuál consideras que es el primer cómic en el que inauguraste de forma evidente este cruce de caminos?

Mi relación como historietista con la literatura comenzó en colaboración con el guionista Onliyú en la revista El Víbora en los 80. Onliyú era un guionista atípico en El Víbora porque reunía en sus guiones tanto una cultura enciclopédica como el descaro del underground. Y confió mucho en mis dibujos para abordar a escritores como Marcel Schwob y Nathaniel Hawthorne, añadiéndoles el humor irreverente que le caracterizaba. Yo tenía total libertad para dibujar lo que quisiera a partir de sus guiones, que reinterpretaban a literatos en El Víbora.

"La hija de Rappaccini" publicado originalmente en la Revista Víbora, guión de Onlyú
“La hija de Rappaccini” publicado originalmente en la Revista Víbora, guión de Onlyú

Tras algunos cómics en los que la vida de diferentes escritores se explica en viñetas entremezclada con su obra, como Maiakoski, Rilke o Baudelaire, ¿cómo llegas a la depuración de Poèmic, desarrollado en comic-strips, y a esa poesía gráfica que más tarde tendrá continuidad con otros títulos?

Al escuchar en una lectura de poesía los poemas de Ferran Fernández, el diseñador Andrés Salvarezza me comentó que le recordaban una tira de cómic. Y, efectivamente, por la noche en mi estudio esbocé una tira de tres viñetas con un poema de Ferran muy sintético, con una primera viñeta de situación, una segunda de nudo y una tercera de desenlace con un gag.
Fue así como me decidí a dibujar todo el Poèmic en tiras, o comic strips, con cada poema de Ferran.

Centrándonos en Insólitos, es la primera vez que publicas con la editorial
malagueña Letraversal, que lleva ya unos años publicando de forma transgresora y transformadora libros de poesía. ¿Cómo comenzó esta colaboración?

Le comenté al poeta Javier Fernández que buscaba una editorial para un cómic de poesía gráfica —en el que él estaba también dibujado— con doce poetas de diferentes generaciones y diferentes credos poéticos. Él me comentó que conocía al poeta Ángelo Nestore, editor y fundador de Letraversal, una editorial innovadora y rupturista de poesía en Málaga.
De hecho, también en Málaga, el Centro Cultural Generación del 27, con el poeta José Antonio Mesa Toré, ya me había publicado anteriormente Ocho poemas. Novela gráfica, donde adapté a la secuencia del cómic a ocho poetas: Miriam Reyes, Luis Alberto de Cuenca, Menchu Gutiérrez, Jesús Aguado, Isabel Bono, José Luis Piquero, Julia Otxoa y José Ángel Cilleruelo. En Insólitos. Poesía gráfica aparecen estxs ocho poetas, a los que añadí, para llegar a los doce, a Aurora Luque, Javier Fernández, Esther Ramón y Agustín Calvo Galán. Las historias que cuentan lxs doce poetas en Insólitos son muy variadas y van desde la ruptura de una pareja, la felicidad con una novia gordita o el erotismo de unas sabias manos hasta el suicidio de una chica.

Cinematic, con Ferran Fernandez
Cinematic, con Ferran Fernandez

 

¿Cuál ha sido el criterio de selección de los poetas y de los poemas en sí?

Me interesaba la variedad de generaciones y estilos poéticos. Por ello, les consulté a mis amigos poetas —sobre todo a Jesús Aguado y José Ángel Cilleruelo—, que, además, me pusieron en contacto con lxs autorxs a los que finalmente dibujé. Pero a Esther Ramón, Javier Fernández, Agustín Calvo Galán y Aurora Luque los elegí yo personalmente.
Respecto a Luis Alberto de Cuenca, era impensable no contar con él como poeta en un proyecto de cómic y poesía, dado que él siempre defendió el arte de los tebeos al mismo nivel de calidad y logros creativos que el arte de la poesía.

Y, ¿cómo has adecuado el estilo de las viñetas en cada poema? Si no me equivoco, la presentación de la figura de cada poeta es la misma, ¿no?

En la primera página dedicada a cada poeta aparece una caricatura de su retrato y rodeadx de los principales elementos que definen su poesía. Sin embargo, en los poemas que siguen a este retrato-caricatura aparecen estilos de dibujo y grafismos muy diferentes de acuerdo a la personalidad de cada uno de los poetas. Por ejemplo, la pintura de Botticcelli alternada con flash backs fotográficos de una pareja para el poema de Menchu Gutiérrez, el punk para el poema de Agustín Calvo Galán, Flash Gordon, John Willie y Arcimboldo para Luis Alberto de Cuenca, el dibujo irónico y festivo de la caricatura para Jesús Aguado, el arte griego para Aurora Luque, el erotismo para Miriam Reyes, etc. Experimenté con diferentes estilos de dibujo para cada poeta y poema.

‘El Caso Maiakovski’,
‘El Caso Maiakovski’,

¿Ha sido muy difícil saltar del estilo literario de un/a poeta a otro/a? ¿Cómo has logrado esa continuidad narrativa?

Como el retrato de lxs doce poetas se presentaba en una primera página, seguida de cinco páginas con su poema dibujado, se conseguía en la narración una cierta estructura y base narrativa que permitía incluir también una variación de estilos en el dibujo de los poemas.

¿Nos explica Insólitos un viaje emocional y personal? Es decir, ¿has ordenado los poemas con algún tipo de intención sensorial o narrativa?

Empecé el Insólitos con el poema de Luis Alberto de Cuenca porque es el poeta de mayor edad. Y cerré el álbum con Aurora Luque, porque admiro su poesía. Pero en la lectura intenté que cada poeta fuera muy diferente en su estilo, así como el dibujo del poeta que le precede y el que le sigue. Creo que es interesante que en la poesía contemporánea y en el cómic existan estilos diferentes con un mundo muy particular y diferenciado. Pero parece ser que traigo una especial suerte a lxs poetas porque tres de ellxs recibieron el Premio Nacional de Poesía después de que yo los dibujara, como Aurora Luque, Luis Alberto de Cuenca y Miriam Reyes. Ahora les toca recibir el Premio Nacional a los otrxs poetas que he dibujado en este Insólitos para que la racha de buena suerte laurística continúe.

Pareces tener una conexión especial con la obra del poeta Luis Alberto de Cuenca, con quien ya has trabajado en Vive la vida (2022) y Viñetas de plata
(2017).

Arrabal - LUCES GALIBO 2021
Arrabal – LUCES GALIBO 2021

Yo trabajo muy bien con lxs poetas y guionistas que me tratan bien y que muestran su entusiasmo contagioso cuando ven mis viñetas con sus poemas dibujados en secuencia. Ten en cuenta que a mí me supone cerca de un año y medio o más acabar de dibujar un álbum y si no hay entusiasmo y sincera amistad entre dibujante y poeta-guionista, desde luego, que no puedes estar año y medio al pie del cañón exigiéndote el máximo en el dibujo de un tebeo. Es un trabajo hercúleo el que lleva adelante un dibujante de cómics.
Luis Alberto de Cuenca se pasa todo el año atento a mis bocetos, rotulación, entintado de cada página y con un gran entusiasmo; este apoyo supone también una gran energía para que la dibujante siga dibujando con el mismo entusiasmo.

Me ha gustado mucho que en la edición de Letraversal los poemas se puedan leer primero en viñeta y después en su formato original, es decir en verso, lo cual permite que cada lector y lectora pueda crearse su propia escenografía en viñeta y contrastarla con la tuya. No sé si esa era la intención…

Sí, es nuestra intención reflejar la estructura que construye cada poeta y que interpreta en imágenes el/la lector y la estructura de la lectura seriada del mismo poema en cómic. El poeta Jesús Aguado —que me confesaba hace poco que él lee cómics desde la infancia— me decía el otro día que con mi adaptación al cómic de su poema La gorda este había adquirido la lectura propia de un cuento; la cual no aparecía, sin embargo, en el poema original.

Además, Ángelo Nestore y Letraversal, dentro de su defensa de la experimentación e innovación, han iniciado con Insólitos una nueva colección titulada Letra menuda, en la que desarrollan un diálogo y una hibridación entre la poesía y el resto de las artes. Es todo un honor para mí que me hayan permitido iniciar esta colección y colaborar en esta experimentación entre lenguajes y en la ruptura de fronteras artísticas.

Laura Pérez Vernetti - foto de Andrés Salvarezza
Laura Pérez Vernetti – foto de Andrés Salvarezza

 

El pasado mayo participaste como invitada en unas jornadas organizadas por la Universidad de Montpellier titulada “La adaptación de la poesía a la banda dessinée en castellano” y en la que se debatía sobre los nuevos caminos de la no-ficción en el cómic. ¿Es la no-ficción en cómic el lugar desde el que la viñeta se reinventa?

El cómic es un lenguaje tan rico en posibilidades que no se excluye ninguna experimentación. No hay coto cerrado de ningún tipo. Da cabida a cualquier experimentación.

En esta reconversión del texto literario a imagen, o en esta aparición conjunta de ambos, ¿qué predomina para ti, mensaje o imagen?

En algunas secuencias la imagen dice y sugiere otros elementos que el poema no precisa. Y en algunas estrofas del poema se detallan aspectos importantes que no aparecen en el dibujo.
Se trata de un juego constante y variado entre lo que el poema y una secuencia de imágenes pueden comunicar. Se alimentan, se oponen, se descubren el uno al otro —la poesía y el cómic— en una narración que al final se convierte en un baile abierto a múltiples gestos.

No podemos dejar de hablar de tu formación en Bellas Artes en tus inicios a raíz de la publicación en 2023 de una edición serigráfica limitada de los once Sonetos del Amor Oscuro de Federico García Lorca. ¿Estas investigaciones en Poesía gráfica te han reconectado con aquella Laura de finales de los 70?

Yo no reniego de ninguna de mis experiencias tebeísticas. Valoro tanto mis primeros fanzines, como mi participación en El Víbora, el cómic experimental en Medios revueltos, con Felipe Hernández Cava, el erotismo con Lo Duca o Altarriba, la colaboración con poetas en la poesía gráfica o el último tebeo entre lo onírico y el underground con Javier Pérez Andújar. Pero me pasa como con los libros: el mismo libro —leído a los 16, a los 26, a los 46 o a los 60—, lo veo y leo de forma muy diferente en cada uno de esos momentos de mi vida. Voy probando diferentes caminos y luego me intereso por otras experiencias. Y así, txino txano, van surgiendo mis tebeos.

Para terminar, háblanos del título: Insólitos.

¡Uy!, el título Insólitos fue una votación que nos llevó varios días a lxs doce
poetas dibujados, a los editores Ángelo Nestore y María Eloy-García y a mí. Algunxs poetas enviaron nada menos que ocho propuestas diferentes para el título… Fue una verdadera timba con tropecientos correos entre los 14 poetas y yo. Pero creo, que, al final, encontramos el título perfecto.