La enfermedad de Crohn es una afectación inflamatoria que puede dañar a todo el tracto digestivo, es una enfermedad crónica, de difícil diagnóstico y que puede resultar muy dolorosa. De tripas y corazón es el relato autobiográfico en el que Pozla (apodo de Rémi Zaarour, Amiens 1982) ha reflejado la impronta que dicha enfermedad ha dejado en su vida. Desde una serie de errores médicos que hacen que la enfermedad le sea diagnosticada tarde hasta la evolución de la misma llegando a límites que ponen seriamente en peligro su vida, pasando por la invasiva operación a la que tuvo que someterse para salvarla. De tripas y corazón no es un tratado sobre la enfermedad de Crohn, o no pretende ser solo eso. Aquí se tocan otros temas que van desde el dolor y la impotencia de un individuo ante una enfermedad desconocida, hasta la puesta en evidencia de algunos de los tabús de nuestra sociedad para con la enfermedad -sobretodo si está ligada a las necesidades fisiológicas más básicas- pasando por la deshumanización de la medicina.

El dolor en primera persona
Explicar el dolor no es una tarea sencilla, el dolor suele ser una cosa tan universal como personal, pero transmitirlo es siempre difícil. Existen tablas valorativas, pero nunca es fácil cuantificarlo científicamente. Pozla ha consiguido transmitir sus sensaciones a través de un dibujo expresionista, enraizado en la tradición franco-belga de Morris y Franquin (hay algo de las Ideas Negras de este último que planea en toda la obra), que gira y lleva a niveles de abstracción muy necesarios para transmitir las sensaciones que le han provocado la enfermedad. Sobretodo en su estancia hospitalaria y durante la operación. La representación de sus intestinos ocupando muchas páginas, con espectaculares splash-pages, el uso de color para expresar sentimientos (no solo el dolor, también la ternura familiar), hacen que sea un tebeo visualmente atractivo: simplemente hojeándolo, sin necesidad de conocer el contenido, su peculiar dibujo y rotulación generan mucha curiosidad. Luego al leerlo destaca su capacidad para la empatía: y es que las sensaciones expresadas a través de la experiencia en primera persona tienen ese magnetismo, conectan de inmediato con el lector.

El dolor expresado a través del dibujo.
Originalmente el material central alrededor del que se articula el libro eran los dibujos personales que realizó el autor en su libreta mientras estaba en el hospital. En las diversas presentaciones que ha hecho del libro Pozla explica como a pesar de sufrir resistencia a los analgésicos el simple hecho de poder coger su libreta y dibujar conseguía atenuar el dolor. En el momento en que le enseña dicha libreta a la doctora que lleva su caso es cuando hay un cambio en la relación paciente/médico. Ella puede percibir las sensaciones de su paciente a partir de sus dibujos, y además se percata del potencial de estos para comunicar esas experiencias a otra gente. Así nace el proyecto y más tarde la responsabilidad de Pozla para llevarlo a cabo. Aunque para poder escribir el libro hubo que dejar pasar dos años tras la operación; tiempo suficiente para poder abrirse y hablar de todo ello en público, eso sí, siempre con un toque de humor, pero sin alejarse de  todo lo que quería contar.

El dolor y el pudor
De tripas y corazón es también un alegato para romper con los tabúes sobre los problemas digestivos, sobre las enfermedades relacionadas con el aparato digestivo, sobre tener vergüenza del qué dirán cuando por ejemplo tienes necesidad de entrar en un bar a cagar sí o sí.
Como el propio Pozla dijo en su reciente presentación en Barcelona “somos una sociedad que tiene reparos en hablar de lo que sale del cuerpo pero ninguno en comer mierda”. Ese es otro de los temas que toca la obra: la dieta equivocada y la falta de conocimiento sobre las alternativas es uno de los factores que incrementaron su dolor. Hay cosas que se pueden mejorar simplemente cambiando ciertos hábitos. El cambio de dieta es un tema que la sociedad deberá afrontar en el futuro, no solo por motivos de salud sino ya como una cuestión de supervivencia global.
Otro de los temas abordados es la crítica a la medicina moderna. Como el sistema sanitario afronta un problema desconocido; las enfermedades raras. Pozla sufrió años de errores médicos. Llegar al diagnóstico correcto no solo significó un alivio por el hecho de recibir el tratamiento adecuado por unos gastroenterólogos capacitados, sino que también significó saber y dar un nombre a su enfermedad. Poner nombre a las cosas es importante, es reconocerlas y eso puede ayudar a afrontarlas.


De tripas y corazón
fue premio del jurado en Angouleme en el 2016 y es una delicia gráfica en el que predomina el uso de la caligrafía. No en vano Pozla proviene del mundo del Street Art. La edición de Dibbuks es excelente, muy cuidada en todos los aspectos. En un trabajo donde parte de la narración se articula en la caligrafía cabe destacar el trabajo de su rotulista habitual: Fernando Fuentes, que junto a Pozla han consiguido que no se pierda ningún detalle en esta edición.
Todo esto convierte a De tripas y corazón en otro puntal de uno de los géneros que quizás más ha contribuido a construir el concepto de novela gráfica; el género autobiográfico. Cómics que han ganado a un gran público y que incluso se han abierto al mundo académico médico.



Estos días además de presentar su tebeo en Barcelona, Pozla también ha dejado un mural en la librería Malpaso, donde se pueden ver originales de Tripas y Corazón , e incluso comprarlos.