Viola y Anna son amigas del alma. Como buenas adolescentes dedican sus días a estar juntas, escuchar música y experimentar los cambios por el que están pasando sus cuerpos. Sin embargo, al echarse novio cada una y cumplir años, poco a poco se irán distanciando.
Un paso atrás es un cómic profundamente melancólico, entre bromas y episodios de las vidas de las chicas vamos viendo cómo dejan atrás la inocencia y su mundo se va expandiendo pero también se hace más difícil. La historia seguirá a Anna que ve impotente cómo su amiga Viola va perdiendo su espontaneidad y su alegría.
Martina Sarritzu (Cesena, Italia, 1992) emplea un estilo sucio y abigarrado en sus viñetas. Su trazo de grafito y carboncillo se recrea en texturas, caras expresivas y fondos y lo equilibra con composiciones de página más simples con una, dos o cuatro viñetas y texto entre ellas. Sus chicas aparecen despeinadas, mal maquilladas, con ese aspecto desaliñado que muchas veces da la propia adolescencia.
A lo largo de las páginas de Un paso atrás no pude evitar sentir mucha simpatía por sus protagonistas, la mirada de la autora aunque muestre las partes más feas de la pubertad no deja de estar llena de simpatía y cariño por Viola y Anna. Un cómic muy fresco sobre crecer con las amigas aunque no siempre sea un camino fácil.
