Tras la muerte de su padre, Maude viaja a la isla de Jesmond. Ahí tendrá que enfrentarse a las festividades locales relacionadas con el aniversario del avistamiento de un tiburón y con la presencia inevitable de su padre.

Tiburón Blanco está centrado en el viaje de Maude. Es muy ingeniosa la relación que se establece entre sus partes más oníricas y las figuras geométricas simples, de este modo sabemos que un círculo amarillo representa cierta parte del pasado de Maude y que la transformación de este círculo simbolizará la evolución de los sentimientos de su protagonista.

Genie Espinosa (Barcelona, 1984)nos deleita con el uso que hace del icono y los degradados de color para sus metáforas, muchas veces acercándose al mundo del pictograma y el diseño gráfico. Estos recursos visuales están intercalados con escenas más costumbristas dibujadas en un estilo más convencional con línea gruesa, y fluida. En la composición de página nos encontramos con viñetas grandes con formas muy diversas, jugando mucho con el formato y ese proceso de abstracción mencionado previamente.

Tiburón Blanco es una obra sobre el duelo y su superación. Aunque es un tema del que se ha hablado mucho ya, el enfoque de Espinosa es muy fresco, tanto en lo que cuenta como en la manera de contarlo. Un cómic completamente hipnotizante en el que dan ganas de sumergirse.