Hoops, el título que supone la puesta de largo de Genie Espinosa (Barcelona, 1984) en el mundo del cómic, hace referencia a los aros que luce Pippa, una de las tres protagonistas del cómic. Como en el primer fanzine suyo, Fandom (Panoli Ediciones, 2016), – firmado a medias con Clara Soriano (¡¡¡cuánto se echan de menos sus cómics!!)- unas adolescentes protagonizan la obra. En ese caso eran un grupo de pijas y otro de chonis que se preparaban para asistir al mismo concierto de una boyband y acababan a la greña por la disputa por un desganado chaval del instituto. En Hoops ya no hay hombres de por medio. Como en XTC 69 (Astiberri, 2020) de Jessica Campbell o En un rayo de Sol (La Cúpula, 2019) de Tillie Walden, el macho ha desaparecido de la ecuación y con él se esfumaron guerras, desigualdades sociales, contaminación y miserias. Sin embargo, la desidia de la adolescencia sigue vigente.

Es por ello que el título también hace referencia al salto por un agujero al mundo de fantasía en el que se sumergen Pippa, Gor y Kubo en una de esas tardes quemadas a base de aburrimiento y porros. La ingesta de sustancias psicoactivas casa muy bien con la banda sonora del cómic confeccionada a base de psicodelia de la costa Oeste, concretamente con temas de The Doors y Jefferson Airplane, grupos muy apropiados para la primera juventud y la rebelión generacional. En fin, a lo que vamos, Hoops es un libro que relata y relata muy bien un viaje a un universo sinsentido poblado por amenazas gargantuescas, del que salen airosas las jóvenes gracias a su fraternidad y solidaridad.

El Hoops ondulante y diluido de portada remite a su vez a los seriales de ciencia ficción, misterio y terror barato que han alimentado a generaciones de estudiantes desde la llegada del televisor a nuestros hogares. El granulado entre el negro y el amarillo y las ondulaciones abstractas que salpican al relato remiten a la experimentación gráfica de colegas como Oscar Raña, Gabriel Corbera o Cristina Daura.

Genie Espinosa plantea un relato aparentemente ligero en el que uno puede entretenerse con lo que ella entreteje en un primer nivel de lectura. Sin embargo, Hoops se sumerge en un mundo oscuro de abusos y momentos duros, que pueden llegar a marcar a una persona de por vida, al tiempo que rinde cuentas de manera despampanante con esos abusones y maltratadores que aún se pavonean por patios, parques, callejuelas y descampados. En ese sentido, Genie Espinosa revisita su propia adolescencia y rinde cuentas con sus propios fantasmas, al tiempo que transmite un mensaje de sororidad a las nuevas generaciones.

La Genie se ha sacado de la mesa de dibujo uno de los cómics de la temporada. Fresco y exigente, con un glorioso giro final, tronchante total

Y por último, uno puede deleitarse con las referencias que nos deja la autora en sus páginas, que si una escena emblemática de Grease, que si los fantasmas de Finisterre o de A Ghost Story o que si el Saturno devorando a su hijo de Goya. La Genie se ha sacado de la mesa de dibujo uno de los cómics de la temporada. Fresco y exigente, con un glorioso giro final, tronchante total. Ideal para lectores inquietos de 12 a 100 años. Otra autora autóctona que enriquece el catálogo de Sapristi. Bien jugado, Genie.

Para los que quieran saber más de Genie, os recomiendo la escucha atenta del podcast de David Lafuente y David López, Streaming de dibujantes, en el que la tuvieron como invitada. Si aún os quedan ganas de más, tenéis en youtube la charla que tuvimos Gerardo Vilches y servidor con ella, además de la presentación de Hoops en la librería Gigamesh con Óscar Buenafuente y Giulia Sagramola.