Frantz Duchazeau (Angoulême, Francia, 1951) es un autor de cómic francés que, discretamente, ha ido colocando varios de sus albumes en España. Para el que no le haya seguido mucho la pista, su interés en períodos históricos diversos, así como en el mundo del arte (música y pintura) y biografias varias, lo acercarían un poco a la figura de nuestro Tyto Alba. También por su maestria del trazo en la caricatura oscura y su narrativa dinamica que alterna acción dramática con momentos en los que reina el silencio.
El pintor forajido proyecta la biografia de Lazare Bruandet, un pionero del paisajismo francés que vivió en los años de la Revolución Francesa. La de Bruandet es una figura atormentada e intensa y Duchazeau lo retrata así, entre lo taciturno y agrio. Entre la cierta calma que le daba la pintura de la campiña y las relaciones difíciles y conflictivas con cualquier otro ser humano. Más allá de retratar el carácter del pintor, el autor transmite esa idea en toda la obra, alternando la imagineria urbana, bulliciosa y desquiciada con la rural, muda y equilibrada. Duchazeau parece ensayar así, los motivos del cómo y el porqué de la vida de Bruandet.
Un aspecto que llama poderosamente la atención de la obra son sus similitudes estilísticas y narrativas con Chrisophe Blain. Personalmente, me ha costado disociar la historia que estaba leyendo con la de -por ejemplo- Isaac el pirata. No sólo se cruzan temas, sino tambien ciertas energias, cierto slapstick en la acción. Ojeando otras obras de Duchazeau, la verdad es que he quedado impresionado de la capacidad de transmutación y el mimetismo de su estilo y forma de contar historias hasta el punto de virar por otras vías, como las de los pioneros de la tira de prensa o el underground crumbiano.
Superados los reparos iniciales, la verdad es que este álbum deja buen sabor de boca (aún con su amarga historia) y es una propuesta ideal para continuar moviéndonos en el mundo de la Revolución Francesa en cómic, del que hemos visto cuarto y mitad de obras interesantes recientemente.