Vuelve Magius con Black Metal, una obra que recoge la escena de metal extrema de Noruega de principio de los años noventa que pasó de coquetear con la música satánica a llevarla a la realidad.
¿Qué es Black Metal?
Es una parodia de unos sucesos que ocurrieron en Noruega a principios de los años noventa en una escena de metal extremo. Unos chavales de entre dieciséis y veinte años además de tocar en grupos empezaron a quemar iglesias. Hubo además un asesinato y un suicidio. Es una historia real, pero le reduzco la edad a los protagonistas para que tengan entre siete y diez años.
¿Cómo nace la obra?
En 2001 saqué un fanzine de Black metal con el mismo estilo y la misma historia. Posteriormente retomé la historia y la recopilé en un tomo autoeditado. Pensaba que no tenían calidad suficiente y quería hacer una historia larga mejorada de modo que, cuando estaba con Primavera para Madrid empecé a dibujar unas páginas. Hace año y medio lo retomé y prácticamente realicé todo el libro. El libro es totalmente nuevo y con una calidad muy superior.
Hablemos de los personajes.
Son un tanto dispares. La historia empieza en el momento en el que dos niños se encuentran y viajan con la madre de uno de ellos. Uno es un poco asperger, el conde Grishnackh, y el otro, Harald, es algo mayor y más malo. Es más listo y ya está en la movida del black metal. Va pintado, con el maquillaje, las tachuelas y demás.
Son niños a los que les gustan los juegos de rol, andar siempre disfrazados y llevan esa fantasía a la realidad.
Hay otro niño, Euronymous, que es el líder del grupo Mayhem, que está acostumbrado a mentir y manipular. Va de malvado, pero en realidad nunca hace nada y miente al resto y a sus padres.

En el libro hablas del grupo Mayhem. Del suicidio de su cantante, Dead y de cómo el líder de la banda, Euronymous se encontró el cuerpo, sacó fotos del cadáver y las convirtió en la portada del disco del grupo y guardó cachos de cerebro que iba repartiendo para afianzar sus relaciones. También del asesinato de un chaval y del propio Euronymous. Todo ello basado en hechos reales.
Eso es. Los personajes, las bandas, los discos son reales. Excepto algún chiste y alguna cosilla es todo cierto. Las anécdotas de las grabaciones, muchas frases aunque parezcan inventadas las he cogido de algunas declaraciones.
En toda tu obra está presente el modo en el que el poder se ejerce. En este caso de un modo sectario con una manipulación tanto para los niños como los adultos que les tutelan.
He visto algún documental sobre la escena musical en Noruega y alguno de los personajes que iban a la tienda de discos de Euronymous reconocía que habían vivido cierto lavado de cerebro. Euronymous les hablaba y les convencía de que hicieran cosas, aunque él nunca llevaba a cabo las acciones.
Esta gente lo que querían hacer era una especie de grupo terrorista. Quemaron alguna iglesia y Euronymous les propuso matar cristianos pero no llegó a calar mucho entre la gente la idea.
Once Upon A Time In Norway. En este documental se puede conocer de primera mano los hechos recreados en el cómic.
Te recreas en los ambientes de Noruega.
Lo que hago es explicar un poco las características del país, lo más importante: la monarquía, los juegos olímpicos de invierno, la cultura… Las dos ciudades más importantes son Oslo y Bergen.
Euronymous es de Oslo y el Conde de Bergen. Como viven en ciudades distintas hablaban sobre todo por teléfono. La comunicación por las carreteras era muy mala y por lo general se comunicaban así o por carta o, en alguna ocasión, quedaban para ir a algún concierto importante.

Estamos hablando de una época pre-Internet.
Claro. Aparte vivían en el underground y se escribían cartas con gente de todo el mundo. Había muy buena comunicación. Era mucho más lenta pero efectiva. Cuando asesinaron a Euronymous la gente de Noruega escribió al resto del mundo y así se enteraron de lo que había sucedido. La noticia salió en muchos fanzines, que era el modo de difusión más común del underground de la época.
¿Cómo ha sido la documentación?
He vuelto a leer algún libro como Señores del caos o The Slayer mag diaries, que hizo un fanzinólogo, Jon Kristiansen con entrevistas a grupos de la época. Además he repasado lo que ya conocía de la época.

El humor quita hierro al tema. Los personajes son convertidos en máscaras y los acompañantes prácticamente en muñecos de galleta sin expresión que le dan al relato un toque naif que contrasta con la sordidez del relato.
Es como Noruega. Parece un país muy pacífico, una sociedad muy socialdemócrata, pero en su interior se generan monstruos. Está llena de grandes contrastes.
PROCESOS
Haces tus primeros fanzines en Fog comix movido entiendo por tu pasión por el género musical. Han pasado más de veinte años. En medio te has convertido en un autor consolidado con un premio nacional por Primavera para Madrid. ¿Cómo ha sido revisar todo este material?
No me ha costado mucho volver a la historia porque la tenía muy interiorizada desde hace tiempo. Simplemente he revisado algunas cosas de documentación que tenía y me he puesto a hacerlo con un estilo similar a los anteriores pero mejorado.
En El Método Gemini utilizabas el color, en Primavera para Madrid el dorado estaba presente en todo el trabajo. Aquí volvemos al blanco y negro puro, las tramas manuales y el estilo más underground.
Es que la estética de los grupos era muy blanco y negro. El cómic no podía ser en color ni de ninguna otra manera. En las portadas de los discos utilizan muchos grabados y técnicas antiguas y es algo que he querido transmitir, que recuerden a esa época.
Lo he combinado con monigotes, que son los personajes y le dan ese toque de cómic.
Recuperas el estilo de los fanzines también a través de la tipografía, que es manual.
Todo, incluso el título de la portada, de letras góticas, lo he hecho a mano. Me lo dijo Ata, editor de Autsaider, que la letra manual siempre suma frente a la digital y creo que tiene razón. Cuando ves un libro dibujado a tinta con una letra digital te choca. Quizás no tenga una letra muy bonita, pero creo que encaja bien con el dibujo.
Primavera para Madrid era un libro difícil de llevar a otros países, pero en el caso de Black metal da la sensación de que se podría exportar a otros países. No sé si lo has pensado de cara a rotularlo en otros idiomas.
Yo creo que funcionaría en Noruega, en Alemania, Inglaterra, Estados Unidos… es algo mundial que encajaría en cualquier idioma.

La edición es de Autsaider y llama la atención por lo negro que es.
Me parece que queda muy bien. Cuando lo vi en casa no me llamó tanto la atención, pero cuando lo encontré en El Corte Inglés me pareció que destacaba mucho por lo negro. Casi no parece un libro. Los cantos de las hojas están pintados de negro y es muy compacto.
Da la sensación de que vais al unísono y que las decisiones editoriales benefician al libro.
Sí, pero frente a otros libros en el que le iba pasando material a Ata según lo iba haciendo, en esta ocasión le he entregado prácticamente todo al final y el libro ha salido con la idea que tenía desde el principio, todo muy oscuro y muy compacto.
Tiene un tamaño un poco más grande que los otros y me impactó ver las páginas impresas.
La portada tiene una textura que simula ser de piel.
Así es. Es como si fuese una textura de una chupa de cuero.
¿Cómo trabajas las páginas?
Hago páginas directas. Como vengo del mundo de los fanzines dibujo con lápiz normal y lo borro después de entintar. Trabajo directamente sobre un folio dina4 sin storyboard y si hay algo que no me gusta, lo repito.
En cada libro parece que adaptas el dibujo al proyecto.
Claro. Este cómic pedía un dibujo más elaborado en los fondos y más tramas.
¿A qué público se dirige el libro? Da la sensación que puede llegar a un público que no es específico de cómic, sino que le interesa el género.
Así es. Cuando sacaba los fanzines no lo distribuía dentro de la escena de cómic sino del metal extremo más underground y tuvo muy buena acogida. Me lo compraba gente que no leía cómics, pero le interesaba el tema. Yo creo que puede interesar a cualquiera. El objetivo era que el cómic se entendiese bien y creo que lo he cumplido. En otros cómics la gente me comentaba que se confundía con los personajes y en este caso no es así.

¿Trabajas habitualmente con este tipo de música?
Siempre, incluso cuando hacía Primavera para Madrid y si voy a dibujar algo del grupo Mayhem o Burzum, los pongo para ambientarme.
Entiendo que es la música con la que has crecido. No sé si la música ha evolucionado y tú con ella.
Bueno. Yo empecé a escuchar Black metal un poco tarde, con 18 años. Se seguían editando discos muy buenos pero ya estaban lejos los sucesos del 92 o 93. Se hace música muy buena pero a mí no me gusta tanto.
¿Sección de cómics o de música?
En los dos sitios.
¿Proyectos?
Tengo uno sobre la extrema derecha que cada vez está más de moda y otro sobre la independencia de Murcia. No sé cuál será el primero.
Canciones recomendadas por Magius para escuchar con el libro
Mayhem, De Mysteriis Dom Sathanas, del álbum De Mysteriis Dom Sathanas:
https://www.youtube.com/watch?v=zNs4zSKK9S4
-Burzum, Det som Engang Var, del álbum Hvis Lyset Tar Oss:
https://www.youtube.com/watch?v=Wry9G6rcdQw
-Darkthrone, Inn I De Dype Skogens Fanny, del álbum Under A Funeral Moon:
https://www.youtube.com/watch?v=PVA-bHiONsg
-Emperor, Cósmico Keychain To My Creations And Times, del álbum In The Nightside Eclipse:
https://www.youtube.com/watch?v=lzBCmrk2oIw
-Immortal, The Sun No Longer Rises, del álbum Puré Holocaust:
https://www.youtube.com/watch?v=_frc50rMCeU
-Satyricon, Mother North: