¡Cómo pasa el tiempo! Parece que fue hace nada y ya hace más de medio año que nos quedamos sin la dosis mensual de humor que ofrecía Orgullo y Satisfacción, en la que aparecía, desde el 2015, la serie Troll Corporation. Parece que fue hace nada que descubrimos el talento para el humor de las hermanas Pacheco y fue en 2011 cuando empezaron a publicar en formato digital las historietas de Let’s Pacheco.
Ya es sabido que Orgullo y Satisfacción se formó a partir de la salida de un gran grupo de autores de El Jueves, en protesta por la censura de una portada crítica con la monarquía, y que estos mismos autores ficharon a toda una serie de nuevos talentos. Uno de los fichajes evidentes fue el de Laura Pacheco (Almería, 1984) y Carmen Pacheco (Almería, 1980). Con los dibujos de Laura y los guiones de Carmen ya habíamos leído series tan divertidas como Divas de diván, Carmen y las cosas o Let’s Pacheco! Una semana en familia.
Troll Corporation cuenta las vivencias de un grupo de oficinistas y su jefa, en una empresa que se dedica al troleo organizado en internet. Sus protagonistas son gente corriente, que se ven obligados a cumplir con su trabajo lo mejor que pueden, y eso implica ejercer como trolls y actuar en la red, sin ética ni remordimientos. Su superior es un buen ejemplo del neoliberalismo empresarial llevado a sus máximas cotas y el reflejo de los peores usos de las redes; la pesadilla de una sociedad tan manipulable como la nuestra. Avanzándose a la realidad de las noticias y sabiendo leer perfectamente el signo de los tiempos, esta serie se adelantó a los escándalos de Cambridge Analytics y a las manipulaciones en las elecciones estadounidenses en las que ganó Donald Trump o en la campaña en la que ganó el Brexit. La serie pone en relieve como en internet se puede manipular a la gente tan bien o mejor, que como se ha hecho históricamente mediante los medios tradicionales. Y lo hace en clave de humor costumbrista, que combina la crítica a las condiciones laborales, en estos tiempos de abuso y recortes de derechos, y al mal uso y los peores modos que se ven diariamente en las redes sociales, desde el buenismo hasta el acoso. Todo con una ironía que trabaja como un cuchillo de chef japonés, con precisión y puntillismo, para que el producto final no pierda frescura y sabor. El dibujo de Laura, más caricaturesco quizás que en otros trabajos, mantiene esa línea clara de sus inicios, un trazo amable y una habilidad extraordinaria para la expresividad de los personajes, que contrasta con las ácidas historias que nos cuentan y, al mismo tiempo, le va como anillo al dedo.
Ahora, reunidas todas las entregas en un tomo la lectura gana, al poder ver la evolución de los personajes de una sentada
Troll Corporation no sólo encajó perfectamente dentro de Orgullo y Satisfacción, sino que se convirtió en una de las series regulares de mayor éxito y que más me apetecía leer, un ejemplo de lo buena revista que ha sido. Ahora, reunidas todas las entregas en un tomo por ¡Caramba!, la lectura gana, al poder ver la evolución de los personajes de una sentada -otro aspecto cuidado por las hermanas Pacheco- y que destaca al leer el recopilatorio. La serie de las hermanas Pacheco se une a El Show de Albert Monteys y a La fábrica de problemas de Paco Alcázar. Esperemos que no dejen de aparecer más recopilatorios, que todavía quedan muchas joyas por recuperar.
