Como suele pasar en el mundo de la novela gráfica, Candela Sierra (Ronda, 1990) tuvo un debut en 2023 muy discreto, con una obra, Rotunda (Andana Gráfica, 2023), sobre los vericuetos de la explotación laboral, la formación manipuladora de falsas expectativas y los birlibirloques empresariales poco éticos. Rotunda merecía mucho más reconocimiento del que tuvo hecho que constata en su segunda obra que.
Lo sabes aunque no te lo he dicho es una ficción costumbrista, de fuerte tono satírico, que va saltando de personaje en personaje haciendo un retrato de las relaciones personales en la actualidad. Como otros lúcidos humoristas gráficos en sus respectivos tiempos, Sierra deja testimonio de estos tiempos de culto al ego desmedido, de la falta de comunicación, de la necesidad de satisfacción, aprobación o validación inmediata y la fugacidad de unas relaciones de usar y tirar. Si bien, son fenómenos que casi siempre se han asociado a la tecnología, a las redes sociales y a la comunicación digital, la autora asoma muy puntualmente dichos medios por sus páginas.
Entra así en las interioridades del ser humano del primer mundo en los dosmiles con una retranca variable, un humor que puede cambiar a nivel de sutilidad, haciendo dudar en ocasiones de que exista. En ese espectro de tono me ha recordado a artistas como Flavita Banana u Olivier Schrawuen en los que la mordacidad y la mala leche pueden ir de la mano con tanta elegancia como ingenio formal. Es el otro aspecto destacable de este cómic, la enorme cantidad de recursos formales para manejar la metáfora visual, que también nos hace recordar al maestro Quino.
Lo sabes aunque no te lo he dicho, en resumen, me recuerda que hay ahora mismo un buen puñado de autoras hablando del presente de forma muy interesante, preclara y necesaria.